1. Comete errores. «La persona que nunca comete errores, no prueba nada nuevo»
Muchas personas no se atreven a probar cosas nuevas, por el temor a fracasar. El fracaso no es algo a lo que hay que temer. Normalmente aprenden más lo que pierden que los que ganan. Nuestros errores nos dan la oportunidad de aprender y crecer.
2. Persigue tu curiosidad. «No tengo un talento especial; sólo soy apasionadamente curioso».
La búsqueda de tu curiosidad es el secreto de tu éxito.
3. La perseverancia no tiene precio. «No es que sea muy listo; es que permanezco con los problemas más tiempo».
¿Estás dispuesto a perseverar hasta llegar al destino que querías?.
4. «La Educación es lo que queda, cuando olvidamos lo que hemos aprendido en el colegio».
Dentro de 30 años seguro que no recuerdas lo que decía un capítulo de tu libro de ciencias, pero si recuerdas lo que aprendiste en el camino. Las lecciones de la vida se quedan contigo para siempre.
5. «Soy lo artista suficiente para dibujar libremente con mi imaginación. La imaginación es más importante que el conocimiento. El conocimiento es limitado, la imaginación rodea al mundo».
Cuando reflexionas lo que los humanos hemos andado desde la prehistoria hasta los asombrosos avances tecnológicos, sentirás el poder de la imaginación. Lo que conocemos ha sido construido con la imaginación de nuestros antepasados, lo que tendremos en el futuro se hará con nuestra imaginación.
6. El valor del hombre debería residir en lo que es capaz de dar, y no de recibir. No trates de llegar a ser un hombre de éxito, sino de valores.
7. «Hay dos formas de vivir; puedes vivir cómo si nada fuera un milagro; o puedes hacerlo cómo si todo fuera un milagro».
Cuando nada es un milagro, puedes
8. «Cuando me examino a mi mismo y mis métodos de pensamiento, saco la conclusión que el don de la fantasía ha significado más para mi que cualquier talento para la abstracción o el pensamiento positivo».
Soñar con todas las cosas que puedes lograr, es la llave para una vida llena de positivismo. Deja correr tu imaginación y crea el mundo en el que te gustaría vivir,
9. «Para ser un miembro perfecto de un rebaño de ovejas, uno debe sobretodo ser una oveja».
Para ser un buen empresario, hay que empezar una empresa, no vale con desearlo y no hacerlo por miedo a que no salga bien. Eso puede ser aplicable a todo, para ganar en un juego sobretodo hay que jugar.
10. «Lo más importante es no dejar de cuestionar. La curiosidad tiene su razón de ser».
Las personas inteligentes preguntan. No dejes de preguntarte a ti mismo y a los demás para encontrar soluciones. Esto te ayudará a adquirir más conocimiento y a analizar tu crecimiento en todas las etapas de la vida.
Un curioso apunte sobre Albert Einstein:
¿Es cierto que sacaba malas notas?
¿Quién no ha oído alguna vez algo como «Einstein era un mal estudiante en el colegio, sacaba notas bajas en matemáticas…»?. Tal vez haya servido de consuelo a generaciones de madres de hijos con malas notas, pero Einstein no era un mal estudiante. Al contrario.
No se conservan las notas del pequeño Albert en primaria, pero uno de sus profesores de secundaria recodaba que «como mínimo sacaba 2 en Latín, siendo esta su nota más baja, y en una escala en la que 1 denotaba la mejor calificacón y 4 la peor».
Así pues, ¿De dónde sale el mito de las malas notas de Einstein?. Todo indica que se trata de una confusión de uno de sus primeros biógrafos al describir su etapa escolar en Aarau, Suiza. En 1895 Einstein hizo el examen de acceso al Instituto Politécnico Federal de Zúrich (ETH Zurich) para cursar allí su carrera universitaria, pero lo fallo. ¿Era un mal estudiante? No. Aparentemente el examen incluía una prueba en francés, idioma que Albert no conocía. Este es el primer elemento del mito.
Volvió entonces a su escuela secundaria en la localidad de Arau, para preparar de nueo el acceso al ETH. Durante los primeros dos cuatrimestres obtuvo en casi todas las asignaturas 1 y 2 (recordemos que en ese momento 1 era la nota máxima, y 6 la mínima). A mediados de curso la escuela invirtió la escala, posiblemente en algún proceso de estandarización de notas. A partir de ese momento, Einstein comenzó a obtener 6 y 5 en todas las asignaturas… ¡siendo 6 la nota más alta!
El problema es que muchos biógrafos pasaron esto por alto, y la descripción de Einstein comenzó a ser rutinariamente la de un mal estudiante: Repite curso y obtiene notas que no pasan del 2. Cuando lo hacen, no pasan del 6 (para alguien con una escala de notas entre 0 y 10, Einstein no sería un mal estudiante; sería un caso perdido).
Otro mito asegura que Albert Einstein era tan malo en matemáticas que no podía contar; cuando tocaba el violín se perdía porque no era capaz de contar las notas. Esto, a parte de estar infundando, podría denotar un problema puntual de concentración. ¿Quién no ha dejado alguna vez la cartera en casa?.
Einstein era un excelente alumno y un matemático brillante.